Nace de nuestra certeza, la de Adriana e Inés, amigas de toda la vida: juntas queríamos dar forma a un proyecto propio, hecho con amor. Y tras años dedicadas a nuestras carreras profesionales, cortadas por el patrón de la urgencia, decidimos restar revoluciones y sumar corazón. Ya era hora de hacer las cosas a nuestra manera.

Nuestra forma de entender el mundo implicaba sustituir las prisas por el esmero y el estrés por la conciencia. Porque Petite Siesta nos ayuda a parar —y a reparar— en ese momento en el que todos, desde que nacemos, nos entregamos al sueño y nos dejamos abrazar por él. Por eso diseñamos y confecciona prendas cómodas en las que la calidad, nuestra seña de identidad, marca todo el proceso: desde la recogida a mano del mejor algodón de Perú, 100% algodón pima, hasta la revisión de cada puntada. Las piezas de Petite Siesta están hechas artesanalmente y cuentan una historia de cuidado, de tradición y de respeto.

Nosotras elegimos volver a empezar y apostar por aquello en lo que de verdad creíamos. Y si la certeza que nos unió es bonita, lo es más el saber que nuestra visión se comprende, se valora y se comparte. Porque si para nosotras el parar fue sanador, hoy son muchos los que también encuentran en este proyecto el poder reparador de una buena siesta.